martes, 6 de octubre de 2009

El siete de Octubre


A veces, cuando fijas una fecha para hacer algo importante, te imaginas cómo te vas a sentir en ese momento. Pues ese momento es mañana, y me siento como imaginaba. Los discos salen de la fábrica mañana a medio día, me lo acaban de confirmar. Mañana voy a ver mi nuevo disco físicamente, ese objeto que Paloma Pájaro ha convertido en una obra de arte en sí mismo, y lo voy a presentar en directo en la Sala Clamores de Madrid junto a Óscar y Alberto. Es, sin duda, un gran día; digamos que he soñado con esto durante años, pero mis sueños no pudieron ser más perfectos de lo que es la realidad. Un disco grabado en directo (¿honestidad o impúdico exhibicionismo? Por mí que sean las dos.), un disco que dentro de un año será muy diferente. De hecho estamos incorporando nuevo repertorio, algo inevitable.

Mañana es un gran día, y ahora es el día antes, un gran día también. Estoy seguro de que pasado mañana también. Y como mañana empezó hace ya unos días estoy contento y satisfecho. Estoy nervioso, pero eso es una buena señal.

Me agacho, huelo el suelo y salto...

No hay comentarios:

Publicar un comentario